Ir al contenido principal

Cómo comer en Suiza sin arruinarse.


Suiza es un país muy especial ya que no pertenece a la UE y está rodeado de paises de la Europa comunitaria. Su moneda es el franco, que vale 0.65 euros y tiene un montón de rarezas y peculiaridades llamativas. Aquí los particulares que viven en edificios de viviendas no pueden poseer una lavadora en su domicilio sino que deben utilizar una máquina comunitaria ubicada en el sótano. Todo está muy reglamentado en este país de cuatro lenguas. El plato que sale arriba cuesta 7.60 euros y lo podemos degustar en el restaurante del supermercado Coop.

Evidentemente Suiza es un país de alto coste, aunque también de alta calidad; no obstante, los alojamientos no dan la talla según los estándares ibéricos. En el tema del transporte la cosa ya es muy diferente.
Hay muchas cosas que ver allí pero los precios pueden ser muy elevados en la hostelería convencional, incluso para los propios suizos. Así pues, se imponen soluciones radicales y prácticas. Sí es posible comer a un precio muy conveniente utilizando los restaurantes de las dos principales cadenas de supermercados, que son Coop y Migros, extendidas por todo el territorio suizo. Hay que aprovechar esta posibilidad para las comidas ya que a la cena nos los encontraremos cerrados.
Coop vende platos como el de arriba y menús semanales a precios más reducidos, de modo que será posible comer un plato fuerte y un postre o una entrada, con bebida y café por menos de 13 euros por persona, lo que no está nada mal. La comida es bastante buena para ser de autoservicio y la he probado en más de una ocasión. Parecía que acabaría comiendo en McDonalds a diario pero no fue así y por lo menos los dos supermercados me facilitaron una alimentación digna.

Entradas populares de este blog

BOFROST. LOS CONGELADOS QUE PARECEN CAROS Y SALEN MUY BIEN DE PRECIO.

Ojo porque esto no es un publirreportaje aunque lo parezca. Los de Bofrost no me dan nada a cambio de hablar bien de ellos. El caso es que ya conocía la empresa desde hace años porque una vecina les compraba muchísimo, ya que no podía ir a la compra y prefería que se lo sirvieran todo a domicilio. La tal vecina no tenía problemas económicos y yo prefería comprar más barato en supermercados convencionales. Lo que ocurrió fue que me mudé a una vivienda unifamiliar y desde entonces me animé a probar los productos congelados de Bofrost, siempre más caros que otros similares que se hallan en la gran distribución comercial. No me parecía convincente la ventaja del servicio a domicilio porque utilizaba bolsas isotérmicas para el transporte. Tras un primer pedido fui cambiando de idea. El incremento de precio redundaba en una calidad muy superior y aunque el aumento de gasto era aritmético, el incremento de calidad resultaba geométrico o exponencial, si se me permite el juego de palabras

PAN DE CARRAL. UN GRAN PAN GALLEGO LLEGA A MERCADONA.

Puede dar la impresión de que este blog publicita productos pero en realidad solo publico artículos sobre las cosas que me han gustado y creo que pueden interesar a los aficionados a los buenos sabores. De hecho casi siempre informo a los productores de que he escrito un texto sobre sus productos y nadie contesta nunca, ni siquiera dan las gracias por hacerles la publicidad gratuita. Todo sea por los lectores y nada por los fabricantes. Por supuesto que Mercadona no necesita publicidad y nunca mejor dicho porque su inversión en anuncios es cero. Lo que les sobra son clientes. Ahora bien, tanto insistir con los precios bajos que en general lo de la calidad les queda un poco lejos en muchos artículos. Digamos que ofrecen precios competitivos y dentro de ellos intentan conseguir la mayor calidad posible, pero en ciertas secciones se quedan muy cortos. Menos mal que alguien ha tenido la brillante idea de vender un pan gourmet de alta calidad en Mercadona. Es gallego, como no podía ser

Cafetera Solac Freecoffee. La alternativa a la Nespresso.

Hay que reconocer que la cafetera Nespresso se ha hecho muy popular y sobre todo por su aura de exclusividad; resulta muy adecuada para gente que toma poco café y puede pagar cápsulas por encima de los 30 céntimos , dependiendo para ello de los pedidos a domicilio o de ciertas tiendas físicas. Ahora Solac lanza una cafetera llamada Freecoffee que pretende ofrecer las mismas ventajas de la Nespresso y ciértamente mejora algunas cosas pero no todas . En esta cafetera se puede utilizar cualquier monodosis ESE, las que tienen formato de pastillas, lo cual no nos ata a ninguna marca, de modo que el precio por café baja a la mitad. El precio no parece especialmente atractivo y al parecer se comercializa por encima de los 100 euros. El problema con una cafetera de cápsulas como la Nespresso o de pastillas como la Freecoffee es que quedamos condenados a la elaboración de un único café en cada uso, con lo que renunciamos para siempre al café en grano que moleríamos a nuestro gusto y también