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Mostrando entradas de agosto, 2013

RESTAURANTE INIRO. HOTEL PALACIO DE SOÑANES. VILLACARRIEDO.CANTABRIA.

Mira que hay restaurantes en España y tengo que ir precisamente al de un hotel. Como si no hubiera otros sitios. Ya se sabe que los restaurantes de hotel casi nunca son recomendables. Menos mal que en este caso hablamos de una excepción muy honrosa. El Palacio de Soñanes es un hotel arquitectónicamente emblemático y tiene una categoría equiparable a la de los Relais&Chateaux, con un edificio que lo haría pasar perfectamente por Parador de Turismo de los históricos. Solo por verlo ya merece la pena ir a Villacarriedo aunque no haya muchos más atractivos turísticos en la villa. El restaurante ofrece un menú pasiego por 25 euros, incluyendo un cocido montañés, media ración de chipirones en su tinta, media de entrecot y el postre, amén de bebidas y café, lo que no está nada mal teniendo en cuenta que se come en un coquetísimo comedor ideal para quedar de cine con la pareja o lucirse con los amigos. El entorno del palacio también está muy cuidado y el marco es de los incomparables

LOS PLATOS "DE LA ABUELA" NO LOS HA HECHO LA ABUELA.

Pues eso, que aunque los haya hecho la abuela no por eso van a ser mejores. Desgraciadamente ese apelativo se ha popularizado hasta extremos indecentes y no aporta absolutamente nada, más bien al contrario espanta a los clientes, como colocar un cartel de "restaurante típico".  Si pudiera comería únicamente en restaurantes de postín pero no me queda más remedio que recurrir a la hostelería convencional con menús para la clase media, donde los nombres de los platos no suelen tener ni apellidos y se anuncian como cordero, merluza o ternera, sin especificar siquiera la preparación.  Las tartas de la abuela generalmente remiten a tartas de galletas cuya dificultad de elaboración es similar a la del manejo de un botijo y no suponen mayor deleite que las hechas por un primo, la cuñada o el vecino del cuarto. Los postres caseros no tienen porqué ser deliberadamente simples sino que pueden constituir verdaderas virguerías gastronómicas con ingredientes de primera y detallitos e

COMPRANDO VINOS EN EL LIDL.

Los supermercados Lidl tienen una estética tan germánica y tan parecida a la de una ferretería que espantan a quienes buscan el glamour. La selección de productos es poco variada y sin embargo constituyen un excelente lugar para encontrar auténticos vinazos a precio de bajo coste. Llevo años comprando vinos en Lidl porque me ofrecen lo que busco, es decir, excelentes vinos de mesa para tomar a diario por menos de cinco euros la botella.  No ofrecen todas las denominaciones de orígen ni falta que me hace. El de la foto es un rosado navarro que sale a menos de dos euros y que va de cine; seguro que los hay mejores pero fijo que son mucho más caros y naturalmente que los hay por menos dinero pero no hay quien los beba. Los amantes del Rioja y del Ribera tienen caldos excelentes que hacen muy bien papel incluso en las mejores mesas. Felizmente hay buenos blancos Chardonnay o Albariño y así no tengo que tomarme un Verdejo, que sigue sin cautivarme. La selección de vinos extranjeros abar

BOFROST. LOS CONGELADOS QUE PARECEN CAROS Y SALEN MUY BIEN DE PRECIO.

Ojo porque esto no es un publirreportaje aunque lo parezca. Los de Bofrost no me dan nada a cambio de hablar bien de ellos. El caso es que ya conocía la empresa desde hace años porque una vecina les compraba muchísimo, ya que no podía ir a la compra y prefería que se lo sirvieran todo a domicilio. La tal vecina no tenía problemas económicos y yo prefería comprar más barato en supermercados convencionales. Lo que ocurrió fue que me mudé a una vivienda unifamiliar y desde entonces me animé a probar los productos congelados de Bofrost, siempre más caros que otros similares que se hallan en la gran distribución comercial. No me parecía convincente la ventaja del servicio a domicilio porque utilizaba bolsas isotérmicas para el transporte. Tras un primer pedido fui cambiando de idea. El incremento de precio redundaba en una calidad muy superior y aunque el aumento de gasto era aritmético, el incremento de calidad resultaba geométrico o exponencial, si se me permite el juego de palabras

PASTAS ARTESANAS DEL BOEDO. MUY BUENAS Y MUY BARATAS.

Hace unas semanas me encontré con una feria dedicada a los productos dulces de Castilla y León en Aguilar de Campoo. Allí adquirí algunos que me gustaron bastante y estaban a buen precio. Lo curioso es que la apuesta de prueba la hice con estas pastas que salen en la foto. Como eran tan baratas, no me jugaba casi nada y te daban dos cajitas por tres euros. Por muy malas que fueran, siempre servirían para un apaño.    La agradable sorpresa fue abrir la primera caja y descubrir que se trataba de unas pastas excelsas y casi sublimes. Se notaba una elaboración muy reciente y un sabor refinado, al máximo nivel posible. Obviamente la segunda caja cayó enseguida y me arrepentí de no haber comprado más. Estas pastas te las venden como delicatessen de lujo en el Harrod's y las pagas a lo que te pidan. No obstante, como estamos en España y el precio es tan asequible, acabas hasta sospechando. Las apariencias engañan.    Estas y otras pastas se pueden comprar en la web oficial, c